Cuantas alegrías depara el camino, en tan poco tiempo.
Dos horas de aprendizaje de los de verdad, de los que llenan tanto el alma, el corazón el interior de uno mismo. De esos momentos en los que en varias ocasiones parece que las lágrimas asoman al iris para convertirse en una inmensa sonrisa, en el disfrutar de las cosas apasionantes de la vida respirando profundamente para dejar fluir el aire con un suspiro sonoro de alegría.
Tantas veces he caminado por estos y otros lugares disfrutando del entorno y la compañía silenciosa, y alborotadora a la vez de mis acompañantes sean quienes sean. Infinidad de pequeños detalles que llegan con cada paso que doy, parándome simplemente para ver una mariposa, una flor, una rama de un árbol abarrotada de pequeños insectos e intentar descubrir mil y una formas de vida.
Este jueves he aprendido durante 2 horas una lección inolvidable.
He salido a investigar un tramo de río para futuras caminatas en mi tierra y decidí llevarme a Jacobo, el pequeño de mis “cachorros” jejejeje (5 años), que, por cierto, es el culpable de que yo utilice tanto diminutivo al escribir, y algunos aprovechen para reírse de mi, jejeje. No estaba seguro si podríamos andar mucho tiempo así que cuando llegamos al río le dejé un rato para que se entretuviera tirando pequeños guijarros al agua, hasta que los pequeños se convirtieron en “ Uffff como pesa este, ven papi ayúdame a cogerlo”. Había llegado el momento de continuar.
El camino comenzaba bien. Una pequeña senda de pescadores pegada al río Liñares ( un afluente del río Ulla ) y la primera lección llegó pronto. “Papi mira que catarata buahhh ¡!! es enorme”. Rápidamente mi reacción fue comenzar a decir “ cari, pero si es un saltito de nada”, pero algo me frenó y mi contestación fue, “caray pues si que es una buena catarata”. A partir de este momento mis ojos y oídos se modificaron por completo para ponerme en su lugar y ver las cosas tal como el me las iba describiendo y a la vez ayudándolo para que todas esas sensaciones que iba viviendo me las contara sin dejar nada en ese espectacular camino que estábamos recorriendo juntos. Alentado por mis comentarios, pronto tuve que callarme, puesto que él narraba la historia.
“Mira que poza, el próximo día traemos a Marcos ( mi otro nene) y nos bañamos “ ( profundidad 40cms).
Ruido de aleteo en el agua. “Corre que se nos escapan los patos”, como para ponerse a correr detrás de ellos.
Según yo le iba diciendo cosas, tarde o temprano las repetía. “Una rama, cuidado”, “Sitio peligroso no te fíes”. “Aquí si que me tienes que llevar a la espalda, yo solo no doy pasado”, y venga, un ratito a la espalda.
Por momentos había que apartarse del camino y subir por rocas, pero una vez sobrepasado el primer escoyo, y viendo la ilusión de ambos y que el peligro no era tal, decido seguir y emborracharme con tanta alegría.
“Una serpiente, es mejor dejarla ir, que no sabemos si es venenosa”
“Escucha, hay un montón de ranitas, están jugando que hacen mucho ruído”
“Chisssssss ahora calladito, que después de esa curva están los patos” jejejejej.
“Mira hacia atrás, si que es bonito ehhhh”
“¿Porque hay tantas plantas dentro del agua ¿”
De repente se para en seco, me mira directamente a los ojos y frunciendo el ceño me estampa. “ Ata aquí chega ó monstruo do lixo, papi”.
Para todos aquellos que nos leéis desde fuera de Galicia “o lixo” es la basura, que hasta el se asusta de que en estos lugares tan apartados la podemos encontrar.
Encontramos unos puentes de madera con una pinta, como diría yo, ehh , nada fiables, pero el peque ya estaba investigando como pasar. Que crack .
Después de una hora decido dar vuelta y regresar por donde habíamos venido, no sin antes escuchar una queja de porque teníamos que volver. Nunca había recordado tantas cosas en tan poco tiempo. A mayores de las cosas nuevas que íbamos viendo, el peque recordaba con risas todo lo que hacía tan solo un momento, habíamos vivido.
Cuando se hace una ruta, siempre es bueno ir aportando cosas según uno u otro las pueda ir contemplando. Ahora, sin ninguna duda estoy convencido que cualquier cosa por pequeña que sea que nos encontremos en el camino hay que expresarla, para que todos puedan ver y saborear eses pequeños detalles que a veces, nos dejamos solo para nosotros.
Solo con ver la carita de felicidad, sorpresa y entusiasmo que se le ponía con cada nueva visión, me hacía recordar y disfrutar todavía más del incalculable valor que tenemos a nuestro alcance con cada pisada por nuestra naturaleza.
Este día me has regalado 2 horas de aprendizaje. Gracias
EN ALGUN LUGAR DEL CAMINO
"Ehhh ! , artista no te vayas tan lejos
"Tranquilo papi, cuando me tengas que coger en la espalda otra vez ya te aviso yo"
LAS FRASES
“Cuando volvemos papi”
“Pronto cari, pronto”
“Biennnnnnnnnn”
NOS VEMOS EN EL CA MINO
La mejor ruta de todas sin lugar a dudas, cuando menos te lo esperes lo tienes levantándote por la mañana para venirse de ruta con nosotros jejej.
ResponderEliminarSimplemente GENIAL.
Nos vemos en el camino.
Ya lo estoy escuchando este Sabado " mañana levantame que me voy con vosotros" jajajaj.
EliminarTodas y cada una son mas y mejores
Te veo en el camino
" No olvidarnos nunca de la capacidad que tenemos de dejar salir al niñ@ que todavía sigue aquí dentro ". Disfrutamos, lo contemplamos todo y a todos con otra mirada, esa que tanto nos nutre.
ResponderEliminarEnhorabuena por este jueves acompañado del pequeño Jacobo, que le ha recordado a Toni esa otra forma de " ver ".
Saludos, amigo.
Hola Salo, te puedo asegurar que no me olvido de mi vena infantil jejejej, pero si es cierto que este día, he visto de otra forma.
ResponderEliminarUn abrazo amiga Salo. Haber cuando puedo acompañaros porque os estoy fallando. Te veo en el camino
¡Hola Toni! No eres tú únicamente el que ha tenido 2 horas de aprendizaje.Nosotros hemos tenido contigo unos minutos también de aprendizaje. Con la naturaleza todos aprendemos, los niños porque la descubren de pronto y los no tan niños porque la siguen redescubriendo.Enternecedora y didáctica entrada
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Emilio, me alegran tus palabras y que te unas en esas 2 horas de aprendizaje, la verdad es que yo aprendo con cada paso, sin duda. Un abrazo en tus alturas
EliminarHola Toni
ResponderEliminarQue bonita esta vivencia con tu hijo, seguro que la repites, él será el primero que te lo pedirá y tu estarás encantado de aceptar, seguro.
Siempre es bonito salir a la montaña con los hijos e ir enseñandoles lo que nos presta la naturaleza y de paso poder ver las reacciones de ellos.
Un saludo y sigue enseñandole todo lo que puedas
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Jose, gracias. Usaré una de sus frases " nos vamos de safari ??" jejeje. Y vamos, claro.
EliminarUn abrazo
Es fundamental inculcar a los niñ@s desde bien pequeños el amor por la naturaleza y el gusto por los paseos descubriendo todo lo que nos puede ofrecer. En otros países se Europa es muy normal ver a familias enteras haciendo rutas, con niños muy pequeños. Sin embargo, en nuestro país no hay esa cultura, pero tu entrada demuestra lo que la visión de un niñ@ nos puede aportar.
ResponderEliminarEntrañable entrada, Toni
¡Un abrazo!
Hola amigos, la verdad es que aportan muchísimo. A los dos les encanta salir conmigo al monte, sobre todo a Jacobo. El mayor dentro de poco lo veo con vosotros sacando fotos que es lo que le gusta, y le encanta vuestro blog al igual que a nosotros. Un abrazo, nos vemos en el camino
EliminarExtenso reportaje amigo ,lugares hermosos encuentras
ResponderEliminarGracias por compartirlo
Un abrazo
Hola y gracias, es estupendo encontrar estos lugares que además están tan cerca. Un abrazo
EliminarMuchas gracias por tus palabras de aliento en mis momentosdecisivos, muchas gracias amigo.
ResponderEliminarNos vemos y te sigo de cerquita
Abrazotedecisivo
Hola Sara, espero verte con alegría. Otro abrazodecisivo para vosotros.
Eliminar¡Me ha encantado Toni! he leído todas las rutas que has subido, me he divertido muchísimo con cada una de ellas, pero está es la mejor.
ResponderEliminarQue suerte tiene tu hijo de tener una papá tan simpático como tú que lo lleve a caminar por lugares tan espectaculares como los que tienen por allá.
Y qué suerte tienes tú de tener a Jacobooo!!!
Saludos desde el otro lado del charco.
Hola, muchas gracias por tus comentarios. Me alegra que te gusten nuestros caminos en este otro lado del charco jejej, y nuestra aportación alegre en nuestros pasos por ellos. Un abrazo desde Galicia, nos vemos en el camino
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